La Estrategia Europea sobre Drogas 2013-2020 define entre sus prioridades la de desarrollar y ampliar los modelos integrados de atención sanitaria, cubriendo las necesidades relacionadas con los problemas sanitarios de tipo mental o físico, la rehabilitación y el apoyo social con objeto de mejorar la situación sanitaria y social, la reinserción social y el restablecimiento de los consumidores de droga dependientes y problemáticos, incluyendo los que sufren de comorbilidad.
El Plan de Acción Europeo sobre Drogas 2013-2016, al efecto de desarrollar esa prioridad estratégica, establece como actuación concreta:
El Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA, por sus siglas en inglés) utiliza el término Reintegración social para describir “cualquier intervención social que tenga el objetivo de integrar en la comunidad a consumidores de drogas, actuales o que lo han sido en el pasado”. Los tres “pilares” de la Reintegración social son: alojamiento, educación y empleo (incluyendo la formación vocacional). Se pueden utilizar otro tipo de medidas tales como el counseling y las actividades de ocio.
La Estrategia Nacional sobre Drogas 2009-2016 recoge entre sus objetivos el de facilitar la incorporación a la sociedad de las personas en proceso de rehabilitación, a través de programas de formación integral y de preparación e inserción laboral. Para ello, en el área de asistencia e integración social, propone:
El Plan de Acción sobre Drogas de España 2013-2016 contempla también la incorporación social entre sus objetivos y acciones.
Atendiendo a los principales documentos estratégicos y planes de acción de las instituciones y organizaciones que trabajan en adicciones, en España el término más ampliamente extendido para abarcar las actuaciones de socialización que se llevan a cabo con las personas adictas es el de Incorporación social (junto con el de Integración Social), que comprende tanto las intervenciones de índole social como las de carácter laboral.
La mayoría de las instituciones y organizaciones que trabajan en adicciones incluye la incorporación social en el marco de la Atención Integral, definiéndola como un proceso personalizado y flexible con intervenciones que pretenden implicar activamente a las personas en su autonomía, desarrollo y bienestar social, participación y capacidad crítica con el entorno.
Este proceso se organiza habitualmente a través de un programa personalizado de incorporación que incluye:
Actualmente, en España se desarrolla una amplia variedad de programas de incorporación social en las adicciones (Programas de apoyo a la Incorporación Social
), que hace difícil una tipificación aglutinadora y común. A efectos prácticos, en la DGPNSD hemos propuesto recientemente la siguiente categorización, susceptible de adaptación y mejora según la información que nos aporten la evidencia, las buenas prácticas y las experiencias contrastadas: